La Guardia Civil de Ciudad Real ha desarticulado un importante grupo organizado que se dedicaba al tráfico de drogas y que operaba en toda la provincia, si bien estaban radicados en Campo de Criptana. La operación, que lleva como nombre ‘Princess’, ha puesto fin a la actividad delictiva que desarrollaba este grupo y que ha dado lugar a la detención de 15 personas, cinco de las cuales se encuentran en la cárcel de Herrera de La Mancha y las otras diez están en libertad con cargos, según informó ayer en rueda de prensa el subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, Miguel Lacruz, quien estuvo acompañado de Jesús Manuel Rodrigo, comandante jefe en funciones.
En concreto, diez de los detenidos son vecinos de Campo de Criptana, dos de Alcázar de San Juan, uno de Belmonte (Cuenca) y dos de Rivas-Vaciamadrid (Madrid), cuyas edades están comprendidas entre los 22 y los 41 años.
La operación supuso también la aprehensión de más de 600 gramos de cocaína, 500 gramos de hachís, 1.000 gramos de marihuana y 150 gramos de setas alucinógenas, así como material para la adulteración de la droga, siete turismos de gama alta, dos motocicletas de gran cilindrada y 5.000 euros en metálico, así como el desmantelamiento del «minilaboratorio» que poseía la organización delictiva en la localidad de Campo de Criptana.
El subdelegado del Gobierno puso de manifiesto que han trabajado en este sentido durante seis meses y que las investigaciones se iniciaron después de que los agentes detectaran la existencia de varios puntos de venta de droga en la localidad criptanense. Así, tras las primeras indagaciones, pudieron determinar que los puntos de venta de droga actuaban con el mismo patrón y se surtían de la sustancia estupefaciente en un conocido pub de Campo de Criptana.
En concreto, la persona que regentaba el local, con la ayuda de otros colaboradores, se desplazaba hasta la localidad de Rivas-Vaciamadrid, donde contactaban con varias personas para adquirir las sustancias estupefacientes y, una vez en Campo de Criptana, adulteraban y distribuían todo tipo de droga.
Seguir Leyendo... En concreto, diez de los detenidos son vecinos de Campo de Criptana, dos de Alcázar de San Juan, uno de Belmonte (Cuenca) y dos de Rivas-Vaciamadrid (Madrid), cuyas edades están comprendidas entre los 22 y los 41 años.
La operación supuso también la aprehensión de más de 600 gramos de cocaína, 500 gramos de hachís, 1.000 gramos de marihuana y 150 gramos de setas alucinógenas, así como material para la adulteración de la droga, siete turismos de gama alta, dos motocicletas de gran cilindrada y 5.000 euros en metálico, así como el desmantelamiento del «minilaboratorio» que poseía la organización delictiva en la localidad de Campo de Criptana.
El subdelegado del Gobierno puso de manifiesto que han trabajado en este sentido durante seis meses y que las investigaciones se iniciaron después de que los agentes detectaran la existencia de varios puntos de venta de droga en la localidad criptanense. Así, tras las primeras indagaciones, pudieron determinar que los puntos de venta de droga actuaban con el mismo patrón y se surtían de la sustancia estupefaciente en un conocido pub de Campo de Criptana.
En concreto, la persona que regentaba el local, con la ayuda de otros colaboradores, se desplazaba hasta la localidad de Rivas-Vaciamadrid, donde contactaban con varias personas para adquirir las sustancias estupefacientes y, una vez en Campo de Criptana, adulteraban y distribuían todo tipo de droga.
Lacruz indicó que la red estaba perfectamente organizada y que adoptaba «medidas extremas» para evitar ser ‘pillados’ por los agentes, por lo que se desplazaban en vehículos propios hasta la localidad madrileña y en ocasiones utilizaban transporte público para su regreso a la provincia.
No obstante, el pasado 25 de mayo, los agentes instalaron un gran dispositivo de control, tanto en vías de comunicación como en la estación de autobuses, que dieron como resultado la detención de una persona que ocultaba 540 gramos de cocaína. La detención se produjo a pesar de que se desplazaba en un motocicleta de gran cilindrada y le precedía en un vehículos otros miembros de la red para advertirle de posibles controles de seguridad.
Esta detención abrió la puerta a la detención en cadena de otras 14 personas, además de 12 entradas y registros en domicilios de integrantes de la red, la aprehensión de drogas, el desmantelamiento del minilaboratorio y la desarticulación de un total de 9 puntos de venta en Campo de Criptana, uno en Alcázar de San Juan y dos en Madrid, en Rivas-Vaciamadrid y barrio de Vallecas.
Lacruz también destacó el alto nivel de vida de los detenidos, a pesar de no tener actividad laboral legal alguna, por lo que el subdelegado destacó la importante labor pedagógica, ya que los clientes y posteriormente miembros de la red podían verse atraídos por dicho nivel de vida.
Por último, Lacruz, que aprovechó para felicitar a los agentes por la operación, puso de manifiesto su amor por Campo de Criptana y su deseo de que la juventud de este municipio sea «sana» y «no esclava de la droga». Asimismo, indicó que la operación está «cerrada totalmente».
Fuente: Europa Press
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